Capitulo 82

ADVIERTO! MUT PERVE....! SI NO TE GUSTA, MM DISCULPAS XD



Lo volvio completamente loco y dejara a mi cabeza y a mi razón, en manos de mis sentidos.

Desesperado volví a su boca. Mordió suavemente mi labio superior y luego se alejó para mordisquear mi mandíbula, hasta mi oreja.

Yago: Dios… —dije apenas audible. Ella iba a volverme loco, completamente loco. – Maca... ¿Qué estamos haciendo? 
Maca: Quiero hagamos el amor Yago… - dijo agitada mientras seguía besando mi cuello bajando lentamente por mi cuello.
Yago: ¿Estás segura de esto?
Maca: - sonrió levemente. – Sos lo que más quiero en este mundo… estoy completamente segura—me dijo levantando sus brazos al tiempo que yo me acercaba a ella y la tomaba de la cintura para acercarla de nuevo a mí.

Sus brazos cayeron pesados sobre mis hombros, y se colgó de mí mientras nuestras bocas se fundían en un caliente beso.

Sin dejar de besarnos comencé a caminar a ciegas.

Algunos tropezones, y algunas risitas, hasta que chocamos contra una fría mesa de mármol.

Maca soltó agitada mis labios, mientras que yo la subía a la mesa justo frente a mí. Abrí sus piernas y me paré en medio de ellas. Volví a tomar sus labios, mientras mis manos acarician su cuerpo de bajo de su molesta remera, la cual me deshice de ella con ayuda de Maca_ rápidamente, quedándose únicamente con sus short y su ropa interior. 

Yago: No sabes… no tienes ni la menor idea de cuánto te deseo —le susurré al oído mientras comenzaba a besar su cuello otra vez —Quiero saborear cada centímetro de tu cuerpo, besarte, sentir tu respiración sobre mi cuello mientras te hago el amor...
Maca: Yago… te quiero tanto… —dijo agitada—Esta noche, no hay ninguna otra cosa que desee más que me hagas el amor bonito…

Bajé mis manos y con cuidado acaricie sus muslos y su piel estaba tan caliente como yo en este momento por ella.

Sus manos estaban en mi nuca y acariciaban mis cabellos en forma de provocación. Sentí como sus manos resbalaban hacia delante y comenzaban a bajar por mi pecho, mientras nuestras bocas no paraban. Alejándome apenas para respirar, la acerqué más a mí, logrando más espacio entres sus piernas. Sin ningún problema la tomé en brazos y la subí sobre abdomen. Sentí como sus piernas se cerraban a mí alrededor. 

Gruñí levemente al sentir, tan cerca de mí. 

Gimió cuando la apoyé contra la pared y hundí mis labios en su garganta. Mordisqueé la delicada piel de su cuello, hasta llegar a su oreja.

Yo ya no podía esperar para subir a aquella cama y hacerla mía de una vez por todas…

Me moví levemente contra ella, haciendo que se sobresaltara y me apretara con fuerza, logrando que ella mueva su cintura contra la mía, haciéndome enloquecer y desearla más. Recargando su peso contra la pared, me alejó un poco de ella y con una profunda mirada, volvió a acercarse para tomar mi boca. Volví a caminar a ciegas, pero por un mal movimiento, y estar tan inmerso en aquello, caímos sobre el sillón del living.

Ella quedó sobre mí, pero aun así nuestras bocas no se alejaron ni lo más mínimo. 

Se alejó de mis labios y comenzó a bajar su boca y lengua por mi cuello, y siguió bajando hasta mi pecho.

Maca: Yago… —escuché su ahogada voz sobre los músculos de mi abdomen, me senté para sentarla sobre mí y besar su boca. La tomé de la nuca y la acerqué más a mí, como si eso de verdad fuera posible. Sus firmes pechos estaban apretados contra mi pecho, debajo de ese lindo y delicado sostén blanco de encaje.

Ella tenía una forma tan especial de besar, una forma única. 

Su suave mano acarició mi pecho y subió hasta mi hombro. Se acercó un poco más a mí y comenzó a pasar su lengua por el costado de mi mandíbula. Gruñí al sentir el calor de sus piernas alrededor mío. Ya no aguantaba más… necesitaba de ella… 
Sin ningún problema me puse de pie con ella encima. Mi cabeza dio vueltas al sentir como se envolvía alrededor mío otra vez.

Comencé a subir las pequeñas escaleras que daban a su habitación.

Regresando a su boca, mezclé mi lengua con la suya y mordí con cuidado su labio. 

Al fin llegamos allí arriba. 

Mis manos sostenían con firmeza para que pudiera mantenerse sobre mí.

Caminé un poco más, y al no ver mi camino y estar centrado en la chica que tenía en mis brazos, choque con una pared. Ella gimió fuerte, cuando por causa de la pared, posé mi hinchada erección contra la parte de ella en la que ya no podía esperar para entrar. (loool! perodn pro eso... hahahha em inspire xD ok ok si no les gusto tan detallista me dicen para la 83 no hacerla asi xD osea no seguir asi...)
Maca: Oh, Dios —dijo en un leve gemido. Probé la calidez de su boca y escuché sus susurros de placer. 

Movió sus manos desde mi nuca, a través de mi espalda, hasta encontrar la bragueta de mi pantalón. Echándome hacia atrás ligeramente, observé su cara.